Historia de un reencuentro...
Envuelto por el extraño silencio predominante en la calle, bajo un cielo nublado y viento discreto, he vuelto a respirar aire fresco.
Después de estar encerrado en casa tres semanas consecutivas, fui a dar un paseo a mí perro. Los dos, solos en una calle desierta que suele estar llena de vida.
Disfrutando de ese corto pero agradable momento, he decidido bajar hasta el parking donde duerme el pequeño.
No se veía a nadie, solo acompañaba mis pasos el ruido de las uñas de mi perro sobre el asfalto, las voces lejanas de unos vecinos cocinando con la ventana abierta y el canto de los pájaros...
Empieza mi bajada hacia la entrada del parking. La sensación de soledad se hace pesada, el olor a lejía es presente en toda la entrada.
Por fin llegó a la entrada.
Acompañado por el sonido de un grifo mal cerrado y los ronquidos del operario, avanzó poco a poco en la oscuridad.
Por fin, por fin lo veo, ahí está, el pequeño.
La capa de polvo y carbonilla que lo cubre marca el tiempo que pasa.
Mi perro tumbado en el suelo, decido hacerlo. Subo en mi Ateca.
Durante un breve instante, después de quitarme la mascarilla, en un silencio total, solo disfruto del olor a nuevo que sigue teniendo y pensando en las escapadas que hicimos mi novia, mi hija, mi perro y yo con el. La costa gallega, los campos verdes, los amaneceres de sol, etc...
Fueron 10 minutos, solo, pero que me hicieron desconectar y pensar que, después de todo lo negro, volverá lo bueno para todos nosotros.
Con una cierta melancolía, cierro la puerta, y me doy la vuelta hacia mi prisión de hormigón.
Lleno de emoción, doy un abrazo a mis dos chicas como hacía tiempo que no les daba...
Esa pandemia es una tragedia para todos y tenemos que luchar para que se acabé definitivamente. Nos destroza mentalmente, físicamente, económicamente, pero aún así, tenemos que ser fuerte para vencerla.
Ánimo a todos y cada uno de vosotros y vosotras. Fuerza, mucha fuerza si os toca o tocó de cerca.
Por el bien de todos, quedaros en casa.
Pronto, espero, podremos volver a disfrutar con los nuestros en nuestro precioso coche.
Un abrazo enorme.
PD: perdón por el tostón pero necesitaba escribirlo.